Recomendaciones de Agnes: Cristobal Balenciaga en Disney+



Desde que estrenaron el 19 de enero la serie de Balenciaga en Disney+, mucho ha sido el hype que se ha producido en redes sociales sobre la serie, casi todo relacionado con la maravilla que era la serie.

Dio la casualidad de que el mismo día 20 tenía yo entradas para ir a ver la exposición que mostraba, en un pabellón del Jardín Botánico de Madrid, el vestuario de la serie, y del que - por desgracia - salí bastante decepcionada. 

Y es que, quien ha tenido la suerte de ver vestidos de Balenciaga en el directo (y han sido varias las exposiciones a las que he ido, como ésta), nota a la legua la diferencia: las telas, parte del carácter de las prendas del modisto, son el primer golpe de efecto, pero alguno más hay. Con todo, siempre resulta estupendo para los amantes de la moda como yo, el poder disfrutar de exposiciones así.
Tampoco ayudó que hubiera tropecientas personas por centímetro cuadrado en la exposición, o que la entrada y salida fueran por la misma puerta... era imposible detenerse más de 10 segundos ante cualquier prenda.

Con la serie, me ha pasado un poco lo mismo. La empecé con muchas ganas, porque admiro mucho a Balenciaga, pero como resumen y spoiler diré, así de forma rápida, el siguiente titular: Cómo destrozar un mito en 6 capítulos.
Qué lástima.




¿De qué va, Cristóbal Balenciaga de Disney+?

El biopic se centra en los treinta años que el diseñador (Alberto San Juan) estuvo instalado en París, donde erigió la Maison Balenciaga, un taller de alta costura de referencia que competía directamente con Coco Chanel (Anouk Grinberg) y Christian Dior (Patrice Thibaud).

A través de una entrevista en la que recuerda esta época, conoceremos de la boca de Cristóbbal Balenciafa el exilio republicano, su relación con el matrimonio Bizkarrondo (Josean Bengoetxea y Cecilia Solaguren) y los inversores; la llegada de los alemanes durante la Segunda Guerra Mundial y cómo la alta costura tuvo que convivir con los nazis; o lo que supuso vestir a Fabiola de Bélgica en la boda real.



¿Qué es lo que menos me ha gustado?

Para empezar, la serie es bastante lenta. Predecible, porque aunque Balenciaga vivió varios momentos clave en la historia de España y Mundial (como las Guerras), no es parte del argumento principal, y por tanto, no es algo que me sorprendiera especialmente.

Si me quedó un agrio sabor de boca al final, pues aunque es de sobra conocido el carácter sobrio y serio del protagonista, tras la serie me queda la impresión de que era un déspota cabezón muy egoísta. Tanto es así que me he planteado leerme más cosas sobre él para contrastar, y mejorar mi impresión general.

He echado también de menos conocer los inicios en la profesión de Cristóbal Balenciaga desde el País Vasco y el duro golpe que supuso la Guerra Civil para su carrera, motivo por el cual se fue a París, donde da comienzo la serie.



¿Y lo que más me ha gustado?

Para contrastar, y acabar con una nota más positiva, os cuento qué es lo que más me ha gustado de la serie de Cristóbal Balenciaga... que no va a ser todo malo.

A pesar de que en la exposición me decepcionaron un poco las prendas, para la serie son más que perfectas, y logran que una pueda sumergirse de lleno en el mundo de la casa de alta costura. Los vestidos, los conjuntos... todos ellos junto con una música hiper cuidada, crean una atmósfera muy atinada con la casa y el personaje.

El casting es bastante acertado, y el protagonista tiene tan medidos los gestos que, a pesar de que en un principio no lo creyera, al final me convence de todo como Cristóbal Balenciaga.

Christian Dior es mi personaje favorito sin duda, y eso incluso no apareciendo demasiado.




Las imágenes no me pertenecen y han sido obtenidas de diferentes medios



Puedes seguirme también a través de
 y hacerte fan de mis ilustraciones en @chezagnes_illustrations

Comentarios

Entradas populares de este blog

Star Wars Day: May the 4th be with you

Recomendaciones de Agnes: “La Canción de Aquiles” y “Circe” de Madeline Miller

Chez Agnes Illustrations: Say Spah