Recomendaciones de Agnes: Buscaba la Belleza de Jesús Terrés
Después del empacho de novela policiaca de las últimas semanas, quiero cerrar el mes (y el año, en lo que a críticas de libros se refiere), con una nota más sentimental, y un libro que es comidita para el alma.
Broche de oro, digo yo.
Vaya por delante que esta crítica va un poco con trampa, porque soy fan de Jesús, y porque tuve la ocasión el otro día de que me firmara el libro... y eso siempre da puntos extra.
Todos tenemos nuestras debilidades.
Pero ¿De qué va Buscaba la Belleza?
Buscaba la belleza es una delicada novela con fuertes raíces biográficas que parte de dos acontecimientos traumáticos en la vida del autor separados por veinte años de distancia, pero que gira también en torno a diferentes acepciones y aproximaciones de lo que es la belleza.
Como os decía, tiene un punto muy fuerte de intimidad, ya que el propio Jesús narra experiencias en primera persona sobre su vida que lo han llevado a donde está hoy, siendo el hilo conductor el fallecimiento de su padre (y el luto que ha llevado en torno a este hecho a lo largo de su vida) en contraste con la pérdida de su hijo no nacido dos décadas más tarde.
¿Qué es lo que más me ha gustado?
A mí la forma de escribir de Jesús me encanta, y de hecho, este libro de Buscaba la Belleza anda con muchas frases y párrafos subrayados. Jesús tiene una manera de describir las cosas que, aunque parece sencilla y obvia cuando se pasean tus ojos por las palabras, no lo es tanto, porque requiere una forma distinta de mirar, hacerlo más desde el corazón que desde la cabeza.
Es precisamente este "escribir desde el corazón" lo que hace que te sientas identificado con sus sentimientos en muchas de las páginas... como cuando dice que todos los que hemos perdido a un padre pertenecemos a un club sin nombre muy especial que nos diferencia del resto.
¿Y lo que menos?
Una de las cosas que más me han gustado de Buscaba la Belleza, que es la intimidad con la que está escrito, es precisamente lo que quizás en algunos momentos me ha podido echar para atrás. No porque no me haya gustado, sino porque me ha dado cierto pudor... sentirse tan íntimamente identificado con una lectura, a veces da mucho vértigo, pero es precisamente lo que hace que leer resulte tan interesante y curativo.
En definitiva, os recomiendo con fuerza esta lectura. Porque ayuda a ver más allá de nuestro día a día, y resulta una historia en perfecta comunión con otros escritos de Terrés (de los que como digo, soy fan absoluta). Apenas me ha durado una semana entre las manos, y seguro que volveré a él de nuevo más adelante, como hice con "Nada Importa".
Comentarios