Viernes de lo más completo...
Aprovecho que tengo un ratito antes de que llegue la familia para la celebración para poneros la crítica del cine de ayer... que luego se me va el tiempo y la olla y no cumplo como debiera.
Ayer lo pasamos fenómeno con el plan de Matiu. Pooobre, elle y yo le hicimos esperar una barbaridad en Moncloa, donde había quedado para recogernos, porque a Belle la soltaron tarde de trabajar... llegamos como 40 minutos tarde, y casi no llegamos a la peli. Casi.
Por el camino, aproveché que iba de copiloto para repasar conceptos aprendidos en el código de la circulación... y paree que avanzo con paso firme, lo cul me motiva no sabéis de qué manera. Toy contenta, de veras que sí.
En fin, a la faena que me tengo que arreglar. Anoche vimos Fracture, y toca la crítica de rigor (cortesía esta vez de La Butaca):
Ayer lo pasamos fenómeno con el plan de Matiu. Pooobre, elle y yo le hicimos esperar una barbaridad en Moncloa, donde había quedado para recogernos, porque a Belle la soltaron tarde de trabajar... llegamos como 40 minutos tarde, y casi no llegamos a la peli. Casi.
Por el camino, aproveché que iba de copiloto para repasar conceptos aprendidos en el código de la circulación... y paree que avanzo con paso firme, lo cul me motiva no sabéis de qué manera. Toy contenta, de veras que sí.
En fin, a la faena que me tengo que arreglar. Anoche vimos Fracture, y toca la crítica de rigor (cortesía esta vez de La Butaca):
Tenemos a dos hombres con muy pocas cosas en común: Willy Beachum (Ryan Gosling), un joven y ambicioso fiscal cuya carrera está empezando a despegar; y Ted Crawford (Anthony Hopkins), un ingeniero de mediana edad que acaba de disparar a su mujer (Embeth Davidtz) a sangre fría. Sin embargo, ambos hombres se encuentran cara a cara en un camino directo al desastre. Crawford resulta ser tan complejo e impredecible como el crimen que ha cometido y, mientras el caso perfecto de Willy comienza a desmoronarse, el futuro del joven fiscal parece destruirse con él.
Pues ahí queda eso. Que conste que no pongo más, porque se trata de una de esas pelis que cualquier detalle podría desvelarle a uno tramas importantesy sorprendentes... y no seré yo quien os amargue una buena tarde de cine, porque sin duda alguna, eso s lo que tendréis si vais a ver esta película. Es sorprendente, y te mantiene en vilo hasta el final, que es lo que al fin y al cabo se debería pretendersiempre con este tipo de películas, aunque algunas fallen estrepitosamente en el intento (no es el caso).
Pues ahí queda eso. Que conste que no pongo más, porque se trata de una de esas pelis que cualquier detalle podría desvelarle a uno tramas importantesy sorprendentes... y no seré yo quien os amargue una buena tarde de cine, porque sin duda alguna, eso s lo que tendréis si vais a ver esta película. Es sorprendente, y te mantiene en vilo hasta el final, que es lo que al fin y al cabo se debería pretendersiempre con este tipo de películas, aunque algunas fallen estrepitosamente en el intento (no es el caso).
Antony Hopkins... impecable, no puedo decir nada más. Es que es un actor como la copa de un pino, el tío. Sólo con aparecer en la pantalla hace que te creas el personaje. ¿Y Ryan Gosling? sin duda alguna, el chiquillo dará que hablar, es un gran actor también. Para aquellos que aún no le pongáis cara, estuvo nominado a los últimos Oscar, y es el protagonista de la bellísima, extremadamente triste pero recomendable y magnífica pelícla El Diario de Noah.
Después de el entreteniemiento, un poquito de cena, que el estómago gritaba ya desde la butaca. matiu seleccionó un buffet oriental barato y bastante bueno, aunque un poco extraño en su urtido: sushi, variedades chinas varias y -aquí viene lo gracioso - caña de lomo y queso manchego. Pero muy bien, la verdad...
Comentarios
La verdad que sí,cena y cine fenomenales.Pero sin duda lo mejor,la COMPAÑÍA.
Un beso.
Besitos varios