Flamenco, by Loewe
Buenas tardes...
Venía pensando en el camino de vuelta a casa qué compartir con vosotros hoy, cuando me he encontrado en el correo una sorpresa un tanto especial... un estrecho pero abultado sobre rojo cuyo remitente era ni más ni menos que Loewe.
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Desde que compré el Amazona hace ya algunos meses, Loewe tiene la cortesía de enviarme sus catálogos a casa. Catálogos que en los últimos tiempos tienen un punto artístico y original muy interesantes (os hablaré de otro más adelante). Aunque sin duda alguna, éste se lleva la palma:
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¿No os parece genial? es, cuanto menos... distinto y original, algo a lo que las marcas de lujo al uso no nos tienen acostumbrados. Me encanta el hecho de que cambien los colores de manera bastante sutil (bueno, hasta el final), y que luego se sugiera la ligereza del bolso con el gesto de las manos.
La historia que cuenta el catálogo no es menos interesante, nos cuenta como Stuart Vevers (director creativo de la marca) descubrió en los archivos de Loewe el bolso y decidió relanzarlo tratando de adaptarlo a las necesidades actuales en cuanto a proporciones, pero respetando la que es la materia prima por excelencia de la casa, la napa.
Pero la portada del catálogo nos cuenta más cosas impresas en tinta metalizada rojo sangres sobre las tapas del cuadernillo rosa: nos habla de sus divertidos y llamativos colores (desde el fuxia y el coral hasta el más intenso de los amarillos o el verde manzana) , de sus líneas suaves y curvilíneas, sus diferentes tamaños y modelos (que alternan entre los más sobrios a los más divertidos con distintas combinaciones de colores), de sus bolsillos interiores...
Como digo, una forma distinta de presentar un producto con historia. Porque no hay que tener miedo a pensar fuera de nuestra zona de confort, ni siquiera cuando capitaneamos una sólida empresa de lujo como es Loewe.
El bolso pertenece a la colección otoño/invierno que viene.
Comentarios
No te conocia pero actualizo mi lista. te sigo.
Bsss isabel
SsasDiary
Como bien dices, Martina, es como en el cole! yo también recuerdo pintar florecillas animadas en la esquina de los libros gordos!!! jajajajaja