En familia...
Después de un acople bastante poco ortodoxo via mensajes en el contestador y sms, nos fuimos la familia telerín (menos el largo) a casa de mi prima Lolita a Soto del Real hoy. Ganas había... después de todos llevo sin ver a los enanos desde navidades, y con los buenos ratos que paso con esos niños...
El recibimiento fue más que caluroso, con los críos gritando locos por la emoción. ¡Anda que no los quiero! creí que les daba algo con los regalitos que les había traído. Lo más gracioso fue que, quieriendo hacerles una foto espontánea, acabaron por descubrirme y me pidieron posar con ellos. La foto voy a colgarla en Mundo K, para que vean que sobrinos más corporativos tengo... y más ricos.
Santi y Lolita nos hicieron una comida fabulosa, una fideua riquisísima con aparitivos varios y postres ricos. La verdad es que nos reímos mucho, tanto entonces, como en la sobremesa, en la que acabé pintando, saltando y riendo como la que más con esos preciosos niños. Tintín dijo que parecía una mamá cuando la ayudé a cambiarse de ropa (anda que no es coqueta), y casi me derrito con ella. Mira que es pilla...
Ver a Papá jugar con los niños, es para derretirse también. Parece un abuelito de verdad, aunque ciertamente, casi lo es de estos niños. Creo que todos los que allí teníamos cámara le hicimos un book de fotos, de lo ricos que estaban los 3 juntos, para muestra un botón. Y los niños lo adoran... no es para menos.
A final de tarde, cuando los niños se pusieron a merendar, tuvimos el momento más divertido. Tintín, que no come nada de nada, se había agenciado el paquete de Frosties y no lo soltaba, para regodeo de una servidora, que hasta el saqué un video a la chiquilla. Si lo ven en Mundo K... les da un parraque de la alegría. Lo mismo hasta nos la fichan a la niña, jajajajaja.
Es fabuloso pasar tiempo con la gente que quieres, con la familia. Sobre todo en lugares como éste, donde el cariño casi se palpa. Todos coincidimos en decir a la vuelta lo bien que lo habíamos pasado... ¡¡gracias por invitarnos!!
El recibimiento fue más que caluroso, con los críos gritando locos por la emoción. ¡Anda que no los quiero! creí que les daba algo con los regalitos que les había traído. Lo más gracioso fue que, quieriendo hacerles una foto espontánea, acabaron por descubrirme y me pidieron posar con ellos. La foto voy a colgarla en Mundo K, para que vean que sobrinos más corporativos tengo... y más ricos.
Santi y Lolita nos hicieron una comida fabulosa, una fideua riquisísima con aparitivos varios y postres ricos. La verdad es que nos reímos mucho, tanto entonces, como en la sobremesa, en la que acabé pintando, saltando y riendo como la que más con esos preciosos niños. Tintín dijo que parecía una mamá cuando la ayudé a cambiarse de ropa (anda que no es coqueta), y casi me derrito con ella. Mira que es pilla...
Ver a Papá jugar con los niños, es para derretirse también. Parece un abuelito de verdad, aunque ciertamente, casi lo es de estos niños. Creo que todos los que allí teníamos cámara le hicimos un book de fotos, de lo ricos que estaban los 3 juntos, para muestra un botón. Y los niños lo adoran... no es para menos.
A final de tarde, cuando los niños se pusieron a merendar, tuvimos el momento más divertido. Tintín, que no come nada de nada, se había agenciado el paquete de Frosties y no lo soltaba, para regodeo de una servidora, que hasta el saqué un video a la chiquilla. Si lo ven en Mundo K... les da un parraque de la alegría. Lo mismo hasta nos la fichan a la niña, jajajajaja.
Es fabuloso pasar tiempo con la gente que quieres, con la familia. Sobre todo en lugares como éste, donde el cariño casi se palpa. Todos coincidimos en decir a la vuelta lo bien que lo habíamos pasado... ¡¡gracias por invitarnos!!
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