Durmiendo con NY...
El otro día, en mitad de uno de los aburridísimos temas de reválida, se me ocurrió una idea genial.
Veréis… el martes pasado, cuando fui al oculista, de camino me pasé por Oysho. Desde que he vuelto de visitar Victoria’s Secret en NY contemplo el tema de la ropa interior desde una perspectiva un tanto diferente. Pero a lo que voy… que me enredo. Al entrar, sufrí un enamoramiento total con una prenda que mi madre, más tarde, calificaría de horterada redomada, pero que es simplemente genial… una bata negra de estrechas mangas y asimétrica que me permite taparme las piernas perfectamente de la manera en que más me gusta sentarme cuando estoy en casa: con las piernas cruzadas o encogidas, pero siempre sobre el sofá. Bueno, y como imagináis, me la llevé.
El caso es que el otro día, ya digo, estudiando, se me ocurrió, acordándome de la bata, que yo de pijamas oscuros ando más bien floja… todos tiene colorines varios. Y me dije, ¿y si a la camiseta de ILOVENY le añado un bonito pantaloncillo negro?
Y eso es lo que he hecho. El sábado, cuando quedé con Belle antes de la cena, cometí el delito.
Veréis… el martes pasado, cuando fui al oculista, de camino me pasé por Oysho. Desde que he vuelto de visitar Victoria’s Secret en NY contemplo el tema de la ropa interior desde una perspectiva un tanto diferente. Pero a lo que voy… que me enredo. Al entrar, sufrí un enamoramiento total con una prenda que mi madre, más tarde, calificaría de horterada redomada, pero que es simplemente genial… una bata negra de estrechas mangas y asimétrica que me permite taparme las piernas perfectamente de la manera en que más me gusta sentarme cuando estoy en casa: con las piernas cruzadas o encogidas, pero siempre sobre el sofá. Bueno, y como imagináis, me la llevé.
El caso es que el otro día, ya digo, estudiando, se me ocurrió, acordándome de la bata, que yo de pijamas oscuros ando más bien floja… todos tiene colorines varios. Y me dije, ¿y si a la camiseta de ILOVENY le añado un bonito pantaloncillo negro?
Y eso es lo que he hecho. El sábado, cuando quedé con Belle antes de la cena, cometí el delito.
Ahora tengo un bonito y fashion pijama neoyorkino… soy de lo que no hay.
Comentarios
¿Me apañas un pijama de esos en una talla XXXXXXXXXXL?
Besotes