Desde Copenhague con amor...
Hola a todos!!! Recién conectada desde tierras danesas, os voy a ir contando cómo ha sido mi primera tarde aquí en Copenhague…
El viaje by plane bien, iba yo sólo en un sitio para tres, con lo que me he podido hasta repanchingar. La película, una mierda... una especie de Dirty Dancing post moderno algo más sofisticado (era con danza clásica) pero cutre de verdad... pero bueno, enough para pasar el rato. Los de delante, una parejita de enamorados mega pesados que no me dejaban ver la peli... a ratos dándose el palo, a ratos moviendo la cabeza porque sí… tremendos, me ha faltado nada para meterles una colleja, pero me he contenido…
El aeropuerto de allí muy bien, muy moderno y elegante, pero la salida hacia donde se recogen las maletas más larga que un día sin pan, oyes. Una vez con todos los bártulos (megamaleta, neceser de viaje, ordenador y bolso) bien aposentados en un carrito, en búsqueda del comité de recogida de la universidad de aquí. Misión cumplida, estaban allí mismo… pues nada: jelou jelou, where do you come from? How nice!... lalalá, lalalá típico de bienvenida. Marchamos al hotel del aeropuerto, nos entregan llaves y mil papeles y guías, nos meten en un autobús, y a repartir estudiantes por la ciudad, en plan Hogwarts y el sorting hat.
Por el momento he entroncado con una panda de austriacas a las que describiré con más detenimiento más adelante (llenaría este post completo), una americana muy maja y una pija londinense. También he ofrecido uno de mis riñones a Eugenio, un majete caballero de la resi que ha tenido a bien subirme la maleta hasta el cuarto cuando me ha visto en dificultades…
Por el momento ya he hecho mi primera compra (comida para ir tirando el finde), he desecho mi maleta (que no era moco de pavo) y me he aprovechado de la situación de haber llegado antes que mi compañera para pillar la mejor cama, el cable de red y todo lo bueno… ya estoy instalada, así que la cosa tiene poco remedio para ella. El cuarto es bastante grande, ya os pondré fotos y tal, aunque con baño compartido y de esos con la ducha integrada en el suelo, sí, de ésas que sólo se separa por la cortina… un poco saquete, pero bueno…
Ahora me marcho para la calle, que he quedado con la chupipandi austriaca a las 9 y media. Nos vamos a dar una vuelta, porque es el solsticio de verano y aquí lo celebran haciendo hogueras en los parques y las calles, rememorando épocas en que la brujería estaba de moda. Parece ser que es muy bonito, pero ya os contaré.
El viaje by plane bien, iba yo sólo en un sitio para tres, con lo que me he podido hasta repanchingar. La película, una mierda... una especie de Dirty Dancing post moderno algo más sofisticado (era con danza clásica) pero cutre de verdad... pero bueno, enough para pasar el rato. Los de delante, una parejita de enamorados mega pesados que no me dejaban ver la peli... a ratos dándose el palo, a ratos moviendo la cabeza porque sí… tremendos, me ha faltado nada para meterles una colleja, pero me he contenido…
El aeropuerto de allí muy bien, muy moderno y elegante, pero la salida hacia donde se recogen las maletas más larga que un día sin pan, oyes. Una vez con todos los bártulos (megamaleta, neceser de viaje, ordenador y bolso) bien aposentados en un carrito, en búsqueda del comité de recogida de la universidad de aquí. Misión cumplida, estaban allí mismo… pues nada: jelou jelou, where do you come from? How nice!... lalalá, lalalá típico de bienvenida. Marchamos al hotel del aeropuerto, nos entregan llaves y mil papeles y guías, nos meten en un autobús, y a repartir estudiantes por la ciudad, en plan Hogwarts y el sorting hat.
Por el momento he entroncado con una panda de austriacas a las que describiré con más detenimiento más adelante (llenaría este post completo), una americana muy maja y una pija londinense. También he ofrecido uno de mis riñones a Eugenio, un majete caballero de la resi que ha tenido a bien subirme la maleta hasta el cuarto cuando me ha visto en dificultades…
Por el momento ya he hecho mi primera compra (comida para ir tirando el finde), he desecho mi maleta (que no era moco de pavo) y me he aprovechado de la situación de haber llegado antes que mi compañera para pillar la mejor cama, el cable de red y todo lo bueno… ya estoy instalada, así que la cosa tiene poco remedio para ella. El cuarto es bastante grande, ya os pondré fotos y tal, aunque con baño compartido y de esos con la ducha integrada en el suelo, sí, de ésas que sólo se separa por la cortina… un poco saquete, pero bueno…
Ahora me marcho para la calle, que he quedado con la chupipandi austriaca a las 9 y media. Nos vamos a dar una vuelta, porque es el solsticio de verano y aquí lo celebran haciendo hogueras en los parques y las calles, rememorando épocas en que la brujería estaba de moda. Parece ser que es muy bonito, pero ya os contaré.
Por cierto que aquí los que terminan el High school están de celebración. Unas costumbres las de estos daneses… veréis, resulta que se meten todos en un camión con la parte de atrás al descubierto, se ponen gorros y camisetas blancas y finos de copas, y van gritando desde el camión allá por donde pasan… tremendo, ya os digo. En lo que llevo aquí he visto tres camiones distintos… qué país… qué país…
Comentarios
Me alegro de que el viaje fuera bien. Seguro que tienes mejor tiempo que nosotros aquí, hace tanto calor que cuesta respirar (pero no confirmes este extremo que nos vas a dar mucha envidia). Por cierto, ya estás tardando en colgar fotos. Un beso
un beso muy grande
Pantène
No sabes cuánto me alegro de que hayas llegado bien y tengas ya amigüitos! qué envidia... Aquí se te echa de menos... ójala estuviéramos todos allí!!!!
Hoy la graduación, muy emotiva. todo muy bonito, todos amigos, muchos besos, conocer padres... en fin, mil cosas que vivirás al año que viene!! y con nosotros porque no faltaremos.
Que ahora que estamos prácticamente de vacas espero entrar más en el blog y saber de ti!
1 beso muy grande
Crispi*