Estudiando ética...

Hola mis pequeños… quiero deciros, con todo el pesar de mi corazón, que el motivo de alejamiento (últimamente, demasiados van ya) en materia de contenidos de mi vida en el blog es mi próximo examen de ética… mañana, sin ir más lejos. Como el Sr. Cura que nos da la clase parece más bien estricto y se ha lucido bastante con algunas de las preguntas (el muy pillín ha puesto los epígrafes del libro y no los de sus transparencias para despistar) no he tenido más remedio que equilibrar mi tiempo dedicando todas mis horas libres al estudio de tan necesaria materia en los tiempos que corren… aunque no sea precisamente de ayuda el temario que damos, todo sea dicho.

De todas formas, he de decir en mi favor que, salvo por mi mayor intimidad con Brad Pitt (el austriaco pivón de intercambio de mi clase por el que Pantène y el resto de las féminas beben los vientos) tampoco es que hayan ocurrido grandes cosas en mi vida desde el domingo. Ya digo: mayor intimidad a través de la ética con Brad Pitt (pobre, teníais que ver su cara estudiando la materia en la biblioteca… tuve que pasarle los apuntes por compasión), que además de tener unos ojos que quitan el hipo es bastante simpatiquete y confirmación absoluta de que Bociguismo me somete a una vigilancia que roza la indecencia… sí, sí.. no me creáis exagerada. La tía me tiene sometido a un constante Gran Hermano que acabará por volverme loca del todo. ¡Me tiene refrita!

Esta tarde, bronca en ITM. Vicky se ha puesto estricta (he de decir en su defensa que con razón) al respecto de las actitudes de casi todos los de 1º en clase (bueno, y algunos de los míos también)… ya comentaba yo por ahí que eran una panda de rancios… pues hoy he obtenido confirmación. Gratificante es, sin embargo, que pueda decir que yo he salido limpia de toda esta historia, quiero decir, que conmigo no iba la cosa… porque la bronca ha sido fina.

No había tenido ocasión, pero felicito desde aquí a Phenomene por su propuesta de contrato en una gran multinacional española del gran consumo (especialmente de ciertos chocolates de morada vaca)… su actuación con el rotafolios los dejó estupefactos. ¡Lánzate! Me han dicho que se aprende un montón.

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